Bienvenidos a la unidad 7 donde vamos a hablar sobre todo lo relacionado al SEO.
En esta introducción veremos un resumen de todo el material que tendremos en esta unidad.
SEO son las siglas en inglés de Search Engine Optimization (optimización para motores de búsqueda). Wikipedia lo define como “el proceso de mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de los diferentes buscadores”.
Es muy importante tener claro que el SEO se refiere a los resultados orgánicos, esto es, no pagados. A la opción complementaria (pagar un coste por clic para ocupar los primeros lugares para una búsqueda determinada) se le conoce como SEM o Search Engine Marketing. Por poner una metáfora, el SEO se parece a buscar un buen aparcamiento gratuito al lado del sitio donde tienes que ir, mientras que el SEM sería el equivalente a pagar por un parking.
Como ocurre con casi todas las disciplinas del marketing online, el SEO ha evolucionado mucho a lo largo de los años. En sus orígenes, las técnicas de posicionamiento web eran muy primitivas y se basaban mucho en repetir algunas palabras clave concretas, mientras que ahora se prima muchísimo más la experiencia de usuario.
Los conceptos y técnicas que deberás tener en cuenta dentro del mundo del SEO son:
Por otro lado, a grandes rasgos, existen dos factores básicos que definen el posicionamiento de una página: la relevancia y la autoridad.
La relevancia de una página web se puede definir como su correspondencia con una determinada búsqueda, esto es, cuán bien responde a la duda o petición formulada por el usuario. El objetivo de Google y otros motores de búsqueda es dar el mejor servicio posible a los usuarios ofreciéndoles páginas que les resulten relevantes.
Para controlar este factor, usamos las técnicas de SEO on site, dedicadas a mejorar nuestra propia página web. Su objetivo es hacer que los motores de búsqueda entiendan cuál es su contenido y cómo se relaciona con las búsquedas de los usuarios. Para ello, se usan técnicas como la optimización de palabras clave y URL, la reducción del tiempo de carga, la mejora en la experiencia de usuario, etc.
En segundo lugar tenemos la autoridad, que podemos definir como la popularidad de una web. Cuantos más “votos” reciba una web a través de enlaces, mejor será considerada por los buscadores.
Para mejorar la autoridad de una web se usan técnicas de SEO off site, que se centran en factores externos a la propia web. Lo que se busca es mejorar los parámetros que definen la popularidad de una web de cara a los buscadores: enlaces a la página web, presencia en las redes sociales, menciones en medios, cuántos usuarios hacen clic en nuestra web cuando aparece en sus resultados de búsqueda, etc.
Por último, cabe mencionar que también podemos distinguir entre White Hat SEO, que es aquel que se basa en las prácticas recomendadas por los propios buscadores, y el Black Hat SEO, que busca aprovechar los “huecos” para manipular los resultados rápidamente. Aunque a veces puede conseguir resultados a corto plazo, a largo plazo el Black Hat nunca merece la pena.
Aunque hoy en día nos parece absolutamente imprescindible, lo cierto es que Google no hizo su aparición hasta el año 96 e incluso hoy en día hay países del mundo donde no es especialmente popular. Los orígenes de este tipo de herramientas, llamadas motores de búsqueda, se remontan a principios de los 90, cuando comenzó el auge de las páginas web.
Casi todas las páginas web tienen en común un mismo objetivo: atraer tráfico de calidad. Los motores de búsqueda son una de las maneras más efectivas de traer visitantes potencialmente interesados en el tema de la web en cuestión. Los webmasters se dieron cuenta de ello y empezaron a competir entre sí por posicionar más alto en los buscadores. El SEO había nacido.
Entender qué es el SEO y poner en práctica una buena estrategia es fundamental para el futuro de tu marca. ¿Crees que exageramos? Échale un vistazo a estas razones:
Para entender en profundidad cómo funciona el SEO, tenemos que ver qué es lo que pasa cuando las “arañas” de Google recorren la web. Su funcionamiento se puede resumir en dos pasos: el rastreo y la indexación.
Para entender cómo funciona el rastreo, piensa en el sistema de transporte de una gran ciudad. Cada página web o documento (como un PDF o una imagen) es una parada. Para poder registrar el contenido de cada parada, el motor de búsqueda necesita rastrear la ciudad entera, y para ello usa el mejor camino disponible: los enlaces.
La estructura de enlaces de la web es la que conecta las páginas entre sí, por eso son tan importantes en la optimización. Los robots de los motores de búsqueda usan direcciones de mapas de sitio y de rastreos anteriores para comenzar su búsqueda y van navegando de enlace en enlace. De esta manera, van alcanzando los documentos almacenados en la web.
No todas las webs se rastrean en la misma profundidad o durante el mismo tiempo. Las arañas se sienten especialmente atraídas por el contenido nuevo, ya sea porque se ha creado un sitio desde cero o porque se ha actualizado uno ya existente. El tiempo de carga también es determinante.
El segundo paso es la indexación. Una vez encontrados estos documentos, se ocupan de descifrar su código y guardar algunas “piezas” del mismo para que puedan ser recuperadas cuando un usuario hace una búsqueda. Como te puedes imaginar, estas “piezas” en su conjunto representan un inmenso volumen de información. Por ello, las empresas como Google cuentan con centros de datos masivos donde almacenan esta información, de manera que sea fácilmente recuperable.
Toda esta información sobre las páginas web y los documentos disponibles en la red se ordena en una serie de índices en función de su contenido, su autoridad y su relevancia. Los criterios han ido evolucionando con el tiempo y son cada vez más complejos; además de las palabras clave, se tienen en cuenta factores como la fecha de publicación, si contienen elementos multimedia, la calidad del contenido y muchos otros.
Y con estos dos pasos, ya todo está listo para que el usuario haga su búsqueda. En este momento, se pone en marcha un algoritmo que busca en los índices y ordena los resultados teniendo en cuenta los cientos de factores de posicionamiento, todo ello en cuestión de milisegundos. No es magia, es SEO.
En el posicionamiento orgánico de una web influyen multitud de factores, que además han ido evolucionando con el tiempo y los avances de los buscadores. Vamos a ver las 10 grandes claves del SEO on-page y el SEO off-page
Toda estrategia de posicionamiento natural debería partir de un buen análisis de palabras clave, que tenga en cuenta aspectos como el volumen de búsquedas, el nivel de competencia, la estacionalidad y la relevancia del término para la marca.
Las URL deben ser breves, fáciles de leer y de indexar por los motores de búsqueda. Intenta que sean lo más sencillas posible y que contengan la palabra clave principal de la página a la que se refieren. Es una parte esencial del posicionamiento web este último punto. Si no se incluye la palabra clave, Google no indexará correctamente el contenido.
Las etiquetas de encabezado (H1, H2, H3…) son imprescindibles para organizar la información dentro de cada texto, tanto de cara a los buscadores como para los usuarios.
Google penaliza las páginas con tiempos de carga muy lentos, que además generan un alto porcentaje de rebote y empeoran la experiencia de usuario. Por tanto, conviene hacer una auditoría técnica completa para optimizar todos los factores que influyen en la velocidad de carga. Para facilitar este trabajo de posicionamiento SEO, una de las herramientas más usadas para evaluar la velocidad de carga de una página es PageSpeed Insights.
Al final, tanto Google como los usuarios valoran los contenidos bien estructurados, fáciles de leer y que aportan información en profundidad. Mira este vídeo para aprender cómo puedes desarrollar una estrategia de contenidos exitosa, que te ayude a posicionar de forma natural en buscadores y en la posición TOP 1.
El link building es un factor clave del posicionamiento SEO, pero no todo vale. Apuesta siempre por técnicas naturales para generar enlaces de calidad.
Los vídeos de calidad generan muchos enlaces hacia tu web, y si los cuelgas en YouTube, también se mostrarán en los resultados de búsqueda de Google.
El guest blogging es una técnica muy efectiva tanto para posicionarte como experto SEO en un sector como para generar enlaces entrantes hacia tu web.
Cuando más ricos sean tus contenidos, más fácil lo tendrás para generar enlaces entrantes de manera orgánica. Las infografías son uno de los formatos más populares, sobre todo si se basan en estudios propios.
Al final, lo que mejor funciona para mejorar la reputación de tu web es relacionarte con otras personas de tu sector y buscar oportunidades para colaborar mutuamente. ¡Todos saldréis ganando!
A medida que el posicionamiento evoluciona, también lo hacen las estrategias SEO que se aplican. Estas son las principales tendencias en estrategias SEO que deberías tener en cuenta para tu web:
En el mundo del SEO podemos distinguir diferentes “escuelas”, ya que hay muchas técnicas posibles para mejorar el posicionamiento de una web. Pero la distinción más importante es la de blackhat SEO versus whitehat SEO.
Llamamos blackhat SEO al uso de técnicas de posicionamiento poco éticas o incluso prohibidas explícitamente por los motores de búsqueda. A corto plazo es posible mejorar el ranking de una web con este tipo de prácticas, pero a la larga nunca merece la pena, ya que estas prácticas acaban por ser detectadas y duramente penalizadas.
Entre las técnicas blackhat SEO más comunes tenemos:
En la otra cara de la moneda tenemos el whitehat SEO, esto es, el que emplea únicamente técnicas de posicionamiento éticas y que cuentan con la bendición de los buscadores. Debemos apostar siempre por el whitehat SEO y tener en cuenta que nos aportará resultados sólidos y permanentes a medio/largo plazo.
Las técnicas de whitehat SEO son las prácticas de SEO on-page y off-page que hemos comentado anteriormente: optimizar la estructura de URL y los tiempos de carga, añadir encabezados, incorporar elementos multimedia, hacer guest posting, etc.
A día de hoy, el tráfico desde dispositivos móviles supera al procedente de ordenadores. Y como Google es muy consciente de ello, ha incorporado a su algoritmo el mobile first indexing.
El mobile first indexing consiste en que el algoritmo de Google tiene en cuenta en primer lugar la versión móvil de una web para determinar su posicionamiento. Para los webmasters, esto significa que la web móvil debe considerarse la versión principal y, por tanto, debe estar perfectamente optimizada. Para ello, se recomienda o bien crear una única versión de la web con diseño responsive, o utilizar la herramienta de Google Accelerated Mobile Pages, que sirve para diseñar sitios web centrados en la optimización y la velocidad de carga.
Además, siempre conviene poner en práctica estas recomendaciones de Google sobre mobile first indexing:
Para facilitar la tarea de posicionamiento y análisis SEO, siempre es buena idea apoyarse en alguna herramienta que nos pueda simplificar el trabajo. Para empezar, apúntate 5 de nuestras favoritas:
A veces existe cierta confusión entre los términos SEO y SEM, ya que ambos se refieren a posicionar en los resultados de búsqueda de Google (u otros buscadores). Sin embargo, se trata de disciplinas diferentes.
SEO son las siglas de Search Engine Optimization (optimización para motores de búsqueda). El SEO es el proceso de mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de los buscadores, esto es, que no se paga a la empresa dueña del buscador por posicionar.
En cambio, el SEM o Search Engine Marketing (marketing para motores de búsqueda) se basa en colocar anuncios de pago en los resultados de búsqueda, a través de plataformas publicitarias como Google Ads.
Entre las principales diferencias entre SEM y SEO destacamos las siguientes:
SEO y SEM son disciplinas complementarias, por lo que siempre es preferible que los trabajemos en conjunto, teniendo en cuenta qué palabras clave son más adecuadas para colocar anuncios a corto plazo (generalmente, las que tienen una alta intención de compra) y con cuáles nos interesa más trabajar contenidos y autoridad a largo plazo (normalmente, las más basadas en búsqueda de información).
El SEO local es una herramienta imprescindible para los negocios que cuentan con tiendas físicas, ya que nos permiten dirigir a los usuarios a ellas a partir de sus búsquedas. Por ejemplo, si un usuario busca “restaurante japonés”, Google le sugerirá restaurantes cercanos para que los visite.
El SEO local de una empresa en Google depende de tres factores:
Para poder posicionar en los resultados de SEO local de Google, es imprescindible estar registrado en Google My Business, el servicio de Google para empresas. Aquí puedes crearte un perfil gratuito con información sobre tu negocio.
Para mejorar el SEO local de tu empresa en Google, apunta estas recomendaciones:
El link building y el guest posting son dos elementos fundamentales del SEO off page. En ambos casos, el objetivo es generar enlaces hacia tu web que aumenten su autoridad de cara a los buscadores y atraigan visitas orgánicas.
El link building se basa en generar enlaces entrantes hacia nuestra web. Es muy importante tener en cuenta que está penalizado pagar por enlaces o recurrir al spam; siempre hay que poner en primer lugar que los enlaces creados estén aportando un valor real al usuario o de lo contrario nos expondremos a una penalización por parte de Google.
Estas son algunas recomendaciones básicas para hacer un link building de calidad:
El guest posting se basa en publicar artículos como invitado en otros blogs de tu sector, de manera que se genere un enlace entrante desde su web a la tuya. Para que esta técnica funcione, siempre debemos primar la calidad tanto de la web que alberga nuestro artículo como del contenido en sí.